Locuras que hacer en la vida Volumen 1: Nadar con tiburones blancos

Que sería de la vida si no cometiéramos locuras de vez en cuando. Bueno pues hay una de ellas que siempre me ha llamado la atención y que me gustaría probar si tengo la oportunidad y si consigo armarme del valor suficiente para hacerlo. Para ello "solo" necesito viajar a Sudáfrica, total esta aquí al lado, y contratar un tour que me permitirá nadar con tiburones blancos.

¿En qué consiste el tour?. Pues bien, el viajecito incluye el traslado hasta alta mar, desayuno a bordo, comida, equipo de buceo y todo lo necesario para darte un bañito con un animal que podría comerte si se aburre y si no también. Todo ello por 120 euros, un precio bastante razonable para la aventura que ofrecen.

Por supuesto todo esta controlado por profesionales y el barco esta equipado con una cubierta especial y una jaula con todo lo necesario para que no haya accidentes.

Os dejo un vídeo para que os hagáis una idea de lo que se puede sentir ahí abajo.

Vuelvo a retornar al mundo del blog

Después de mucho tiempo, concretamente desde Marzo, vuelvo a escribir en mi blog. Demasiado tiempo sin actualizar ni comentar nada y creo que es el momento de volver a implicarme un poquito con el asunto.

Y lo voy a hacer dedicando esta entrada a la noche de ayer. Una salida nocturna como otra cualquiera que dejó momentos memorables, conversaciones serias, divertidas, otras relacionadas con el poder y la ambición ( muy poca gente planea casarse con la hija de Luca Cordero di Montezemolo, si es que tiene, porque no lo hemos contrastado) etc etc.

Lo mejor de todo son esas cosas que ocurren cuando la "cafeína" de la "coca-cola" se apodera de nuestras mentes y sorprendemos al mundo con perlas y frases legendarias. Una de ellas salió de la combinación entre mi amigo Palomo y un servidor que concluyó con un " ERES IGUAL DE GUAPA.....QUE LAS NOCHES " . Impresionante piropo, lleno de dulzura, originalidad y sentimiento, digno de entrar en los archivos históricos de la literatura española.

No sería el último momento memorable puesto que Víctor tomó la decisión de regalarnos una patada memorable a una botella de coca-cola que finalizó con el impacto de su pie derecho en el duro y frío hormigón.

Gran noche y gran compañía: Unai, Víctor, Sandra y Palomo.

PD: ¿Cuántas veces han puesto la película de POWDER los domingos por la tarde?

VIVA LISBOA Y EL ATLETICO DE MADRID

Impresionante experiencia en Lisboa con el Atlético de Madrid, el club de mis amores.

El jueves 18, José, Carlos "Pellas", los hermanos Ropero y yo salimos de Alcorcón en dirección a Lisboa. Tras horas de viaje, que parecieron minutos debido a la alegría, el jolgorio y el disco del "Payo" con temazos como " Mi butifarra", " El conejo de mi novia" etc. etc ,llegamos a Lisboa. Senovilla, que es un gentleman, llegaría horas más tardes en su jet privado.

Dejamos las cosas en el hostal (muy bonito por cierto) y fuimos a "visitar" la ciudad, es decir, comer en el McDonald’s, pillar unas cervezas (yo me sacrifiqué y cedí mi litrona) y hacer turismo. Explico nuestra definición de turismo. Para nosotros ir a una ciudad no es visitar monumentos, es visitar estadios de fútbol, en el caso de Lisboa tocaba el Estadio de La Luz (Benfica) y José Alvalade (Sp. Lisboa).

En el estadio del Benfica éramos héroes, la gente nos pedía fotos, nos quería, nos gritaban "Simao Simao" y nos avisaban de que podíamos morir en el partido por los radicales del Sporting.




Tras visitar el estadio de La Luz, precioso y muy moderno, nos dirigimos al José Alvalade ,donde los momentos de tensión se sucedían debido al peligro de que nos mataran por ser rojiblancos. Al final no pasó nada y entramos al estadio dispuestos a clasificarnos. El estadio es una maravilla, de lo mejor que he visto en mi vida, felicito a los arquitectos porque han construido un recinto magnifico.

El partido lleno de emoción y goles. Agüero es un Dios y De Gea nos salvó con una mano maravillosa. La celebración fue impresionante y nos volvimos al hostal con el objetivo cumplido.
Por la noche andamos y andamos, unas cervecitas y a dormir. No sin antes tener conflictos con la seguridad de un McDonald’s. Senovilla tuvo la culpa.

Al día siguiente si hubo turismo del bueno durante buena parte del día y nos volvimos a Madrid con la ilusión de volver a repetir un viaje como este.





GRACIAS A TODOS CHAVALES, UN PLACER VIAJAR CON VOSOTROS, OHHHHHHHHHHH JIMYYYYYY!!!

LA PISCINA DEL DIABLO

En nuestro amado y querido planeta Tierra, existen lugares maravillosos por su belleza, su tradición o su rareza.

Pues bien, he descubierto un lugar que me ha dejado acojon.... Se llama la piscina del diablo ( Devil´s pool para los bilingües ), y se encuentra en el filo de las cataratas de Victoria en Zimbawe. Ya sabeís cogéis la línea 6 en Príncipe Pio y en dos paradas llegáis, esta aquí al lado.



Esta piscina, como podéis ver en la foto y en el video, es de lo más normal, total sólo está en el filo de una catarata con una caída de cien metros aproximadamente, casi igual que la de cualquier piscina municipal.

No sé si algún día podré estar en esa zona, pero dudaría si darme un bañito. Reconozco que la foto sería algo inolvidable, pero aprecio mi vida asique no sé si sería capaz. Sólo se puede disfrutar de ese momento entre septiembre y diciembre, asi que ya lo sabe el que quiera ir.

ESTO ES SENTIR LOS COLORES

El mundo del fútbol tiene una dimensión que traspasa los límites de la razón. Cualquier aficionado que sienta los colores de su equipo, sabe de lo que hablo y este video, que muestro a continuación, defiende la idea de que si hay jugadores que defienden un escudo y una camiseta. No solo por beneficio propio sino por el beneficio de todos los que forman el club: directivos, empleados, jugadores y el número 12 de cada equipo, la afición.
Desde aquí mando mi apoyo a la afición de Pucela y a los jugadores como Marcos.





PD: Eso sí, os queda jugar en el Calderón, lo siento pero ahí los colores me tiran y espero una victoria colchonera.

CICLO "PELICULAS DE MI INFANCIA": KARATE KID

Inicio el ciclo de películas que marcaron mi infancia con un clásico del séptimo arte: Karate Kid.




¿Qué ser humano y extraterrestre con un satélite capaz de captar las emisiones de nuestro planeta, no conoce la historia de Daniel Larusso y su maestro Miyagi? Una historia que lo tiene todo: honor, amor, superación, un japonés dando leches, tensión, emoción, orgullo, un japonés dando leches etc.


La historia de un chico tirillas, que tiene menos pinta de karateka que Paquirrín, y que llega a una ciudad donde no conoce a nadie y donde a las primeras de cambio ya le quieren “canear”. Pero no le quieren zurrar dos pringaos sin conocimientos, no, le quieren dar de leches un grupo de tíos que practican Karate en un gimnasio y cuyo profesor les dice “No hay piedad”.

La cosa se ponía fea para Dani (hay confianza ya), pero como en toda buena historia aparece una chica, y que chica, la belleza que me ha cautivado desde mi más tierna infancia, la que hubiera sido la futura madre de mis hijos si la edad no lo impidiera. Efectivamente, hablo de Elisabeth Shue.






A todo esto llega el HOMBRE, EL GENIO, Pat Morita o como es más conocido, Miyagi. Miyagi le enseña Karate, y su método hay que reconocer que es cojonudo, porque aparte de enseñar artes marciales, consigue que sus alumnos le pinten las vallas de la casa, le ayuden con los bonsáis etc.

Al final con el apoyo de Miyagi y su chica, gana el campeonato de Karate.
Peliculón que marcó mi infancia y que incluso me hizo matricularme en Karate, lo dejé porque decían que si seguía podía llegar a matar con la mirada y no es plan.

PEARL HARBOR

Como amante del cine, aprecio una buena película y en este caso debo decir que Pearl Harbor, tiene un par de cosas que no me terminan de cuadrar. Es un peliculón y la historia de amor es preciosa pero…

La sinopsis oficial de la película es la siguiente: “En la época del bombardeo Japonés de Pearl Harbor, dos amigos, están atrapados en los eventos que llevaron a los Estados Unidos a la Segunda Guerra Mundial. Sirviendo como oficiales de la Armada, Rafe(Ben) es seleccionado para volar con los británicos en Europa. Mientras es abatido y dado por desaparecido, el otro, Danny(Josh), y la novia de Rafe, Evelyn(Kate), son destinados al idílico paraíso de Hawái.”

Pues bien ahora pasaré a relatar cómo es la historia en realidad. Ben Affleck y Josh Harnett son colegas, amigos desde la infancia y ambos son pilotos en el ejército de los EEUU. La historia transcurre en plena segunda guerra mundial y aquí empieza la parte interesante. Nuestro amigo Ben conoce a Kate Beckinsale, bella diosa que el cielo nos ha regalado, y se enamoran perdidamente. Tras varios días, donde Ben se deja la vida en conquistar a la chica, ella accede y parece el inicio de una historia de amor que surcará los mares del tiempo. ERROR.

Ben que es un tío decidido y valiente decide irse a pilotar aviones a Europa, arriesgando su vida por el bien de los demás, lo que indica que es un tío de puta madre que debe ser respetado por pequeños y mayores. La despedida con Kate es espectacular, todo precioso, digno de la mejor postal y Ben se marcha pensando, “la tengo rota, voy a poner su foto en mi avión y así matare nazis como un campeón, volviendo dentro de unos meses y teniendo un matrimonio y una familia feliz”. POBRECILLO.

Mientras, su querido amigo Josh y Kate se van a Hawái (que también tiene huevos que los dos vayan al mismo lado y encima con solecito, playa y aguas cristalinas). Ben se tira meses mandando cartas tooooooodos los días a su amor y ella se va a los acantilados a leerlas y a llorar a gusto echando de menos a su piloto valiente.
Pero claro, estar en una guerra no es bonito y un día el sobrino de Hitler derriba a Ben y se le da por muerto. Aquí empieza el descojone.


Josh recibe la noticia y se la va a contar a Kate. Los dos se apoyan mutuamente en un claro gesto de amistad e inocencia. Pero claro los días van pasando, repito días, porque no pasan años después de la muerte de Ben, sino días y van quedando y haciendo manitas. Mientras, Ben se supone que está muerto y llorando en el cielo viendo lo que le están haciendo los dos cabrones en la tierra. Al final se lían y practican el amor libre entre las bolsas de los paracaídas, todo precioso, porque es precioso, pero que a nadie se le olvide que el mejor amigo de Ben se está zumbando a su amada, que hasta hace poco no podía dejar de pensar en el otro.


Pues bien, empiezan a salir y de repente se hace justicia. Ben aparece un día como el que viene a comprar el pan y resulta que no estaba muerto, sino que sobrevivió. Cuando llega a la base de Hawái deseando ver a su amor, el cual lo ha mantenido vivo durante su penosa y dura estancia en Europa, se encuentra con el pastel. Impresionante recibimiento “hola Ben tío me alegro de que estés vivo, pero una cosa tu novia ahora me la zumbo yo, asique si no te importa déjanos en paz”


Al final los japoneses aparecen en Pearl Harbor y la lían parda. Ben y Josh se reconcilian por el bien de su país y Kate se pone contenta la muy……guapa. En el combate Josh muere y Kate, que no es tonta coge y dice, “vale pues muy fácil, si cuando murió Ben yo me zumbé a Josh, pues ahora al revés, el caso es que yo no me quede sola”. Todo esto con ella embarazada de Josh. Al final se queda con Ben y con el churumbel, ahora bien, pensemos, ¿qué historia le van a contar a ese niño de mayor? Lo que empezó con una bonita historia de amor acaba con cuernos y más cuernos y por ultimo me despido con una reflexión: si esto lo hace un tío la peli ni se estrena. POSDATA: No soy machista, es la realidad.